Hay libros que vienen incluidos con un soundtrack. Las batallas en el desierto no son la excepción. Pero no es la canción de Café Tacuba, es más bien de Caifanes: La célula que explota. Esos acordes iniciales transmiten el mismo sentimiento que el libro de Pacheco: la nostalgia. Tanto la canción como el libro me transporta a un D.F. que ya no existe, uno que sólo queda en fotografías, canciones, libros y recuerdos.
Jose Emilio Pacheco nos lleva por la mirada de un D.F. que se está modernizando. Los cambios mundiales empiezan a afectar al país. La gente empieza a informarse más acerca de la guerras políticas y religiosas que nacen en todo el mundo. Los niños escuchan a los padres opinar sobre temas tan variados que llega a influir en sus juegos.
Todo está cambiando menos una cosa: el amor. Y no, no me refiero al amor así cursi, sino a la idea tabú del amor. Hay carros nuevos pero las familias no hablan con los infantes acerca de sus sentimientos. Hay políticas nuevas, pero enamorarse es un pecado. ¿Será que hoy nos hablan de cómo afrontar nuestras emociones, o sigue siendo un tema tabú? Parece que seguimos siendo los mismos de los años 40´s.
Podemos tener nostalgia de Pedro Infante en la televisión y algunos dulces en la tiendita, pero hay costumbres que es mejor corregir. El pasado fue, ni quitando nombres cambiaremos lo que pasó. No vale mucho el esfuerzo de juzgar a quien ya murió. Lo que sí importa es quitar esa piedra del zapato hoy, en el presente. Haciendo lo que nos sea posible para cambiar nuestro entorno. En Asterión creemos que ese cambio tiene muchos caminos, nosotros tomamos el de la lectura. Acercar los libros clásicos a la comunidad y reflexionar sobre los pasos que vamos dando.
José Emilio Pacheco es increíble.
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